¿Cómo fue la experiencia? ¿Crees que ibas bien preparad@? ¿Llevabas tu currículum bien preparado? ¿Pensaste bien la ropa que te pusiste? ¿Te hicieron preguntas? ¿De qué tipo? ¿Saliste satisfech@ de la entrevista?
He ido a unas cuantas entrevistas de trabajo y en cada una de ellas aprendí algo diferente. La experiencia fue como me la imaginé, pero con más nervios de los que creía, quizá por la falta de seguridad ya que a las entrevistas que he ido era para trabajos temporales, sobre todo en verano, y no conocía muy bien el sector en el que trabajaba, por eso mi falta de seguridad y mi alto nivel de nervios... aunque los nervios siempre están hay que saber disimularlos y parecer seguro.A la pregunta de si iba preparada, la verdad es que no, porque no sabía “donde me metía”.
Tanto la ropa como el peinado iba de acuerdo con la situación. Este punto es muy importante ya que en lo primero en que se fijan es en el currículum... en lo segundo: el aspecto físico. Y esto hay que saber controlarlo a la perfección.
Y ya por último, salí satisfecha porque me contrataron... ¡aunque siempre se puede hacer mejor!
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